Oct
La verificacion china
2 comentariosEn aras de la economía, hice un viaje en un autobús chino que comunica dos ciudades norteamericanas. Es sensiblemente más barato que cualquier otra cosa que uno pueda siquiera pretender. ¿Problemas? Ninguno. Sólo que aquí se habla chino (y lo demás, por gestos). Así que casi por fe tuve que aceptar que el autobús me iba a llevar a mi destino, porque podía llevarme a cualquier otro punto de la geografía americana (ya que Chinatowns hay prácticamente en cualquier parte de los EE.UU). Sólo cuando vi el puente de Benjamin Franklin supe que, gracias a Dios, había llegado a mi destino. Y respiré aliviado. Esta historieta me recuerda la tesis de John Hick de la “verifiación escatológica”. Somos viandantes que vamos por la vida creyendo una serie de cosas sin ver lo que hay al final del camino. Pero al doblar la última curva, lo que creímos durante nuestra senda se verificará o se mostrará que siempre ha sido falso. Es una manera de ver las cosas, claro que sí. Una manera de analizar con categorías filosóficas la certeza que el creyente tiene: que al final, el autobús lleno de chinos, le llevará a ver el puente de Franklin.