18
May
2007May
Mírame a los ojos
5 comentariosIba hoy caminando hacia mi tarea cotidiana en la universidad y al pasar por delante de la biblioteca universitaria Reina Sofía me encuentro un cartel en el que se veía claramente la leyenda “dime que eres del PP”. Cosa más rara, me dije para mí mismo. ¿Qué acontece aquí? (Me puse a hablar casi como un tipo de nuestro siglo de Oro). Revisé el cartel por completo y vi unos ojos inquisitivos y leí todo el asunto: “Mírame a los ojos… y dime que eres del PP”. Firmaban, si mal no recuerdo, las juventudes del otro partido. Aún sigo sin recuperarme. Jajaja. El cine (porque, por suerte pocas veces la vida real nos enfrenta a situaciones de este calibre y un tanto cursis) nos ha enseñado que la frase “mírame a los ojos” precede la declaración de algo increíble, inesperado o que no se puede resistir: “Mírame a los ojos y dime que no me quieres”; “mírame a los ojos y dime que me estás mintiendo”, “mírame a los ojos y dime que soy feo”, etc., etc. “Mírame a los ojos” no es tanto una orden que pide ejecutar un acto cuanto una proferencia de un estado de espera por parte de quien la dice, de espera de que las cosas no sean así. Oséase, que uno no puede ser del PP siendo joven. Supongo que lo mismo pensarán los del PP con respecto a los otros. Pero iba yo dándole vueltas a la cantidad de cosas que se podrían preguntar a un tipo que va a la universidad, pidiéndole que mire a los ojos del interlocutor: “mírame a los ojos y dime que lees La razón, que vas a misa los domingos, que te parece que Fidel Castro es un mal gobernante, que crees que el chalet que se ha hecho José Blanco en la Moraleja no se lo merece, a pesar de lo mucho que trabaja y lo bien preparado que está”, etc. etc. Pues yo pienso mirar a los ojos a quien me dé la gana y a quien me pregunte cosas con sentido, demontre, pues aún nos queda un reducto de libertad para leer, votar, mirar y comprar lo que nos dé la real gana. Y sí, a lo mejor te miro a los ojos. ¿Me mirarás tú?