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Dic2011Cosas nuevas hasta en la lógica
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Dic
Y así, para terminar el año, algo del argumento ontológico, que jamás ha llevado a nadie a creer o a dejar de creer en función de que lo encontrase válido, plausible o simplemente un juego de palabras. Da que pensar, por eso grandes cabezas se han dedicado a él, si bien cabe comprender también, que su sola mención en los circuitos corrientes de lo que “se” habla, “se” piensa o “se dice” es de lo más intempestivo. En fin, que ?continuando el debate del otro día? el final de la Nueva historia de la filosofía occidental de Kenny, termina “riñendo” a B. Russell por haber dicho que “como resultado del análisis del concepto de existencia, la lógica moderna ha probado que este argumento es inválido”. Kenny cita a Plantinga, que lo ha vuelto a poner en la palestra y al que también le han dado palos por todos los lados, pero no es fácil de vencer el profesor de Notre Dame. Kenny dice: “la rehabilitación del argumento por parte de Plantinga sirve como un aviso saludable del peligro que aguarda a cualquier historiador de la lógica que declare que una cuestión filosófica está definitivamente cerrada”. No hay que olvidar que el mismo Kant afirmaba que la lógica había quedado establecida de modo definitivo por Aristóteles…y no ha llovido poco desde entonces. En fin, ahora que nos acercamos al fin (del año, espero que no del mundo, aunque 2012 nos va a dar cháchara sobre el tema día sí día no) conviene recordar que la novedad entra con potencia inusitada cuando uno menos se lo espera, hasta en la lógica y en la ontología. Pues si, desde el Génesis hasta el Apocalipsis, pasando por Isaías, todo el tiempo se nos recuerda el “hago nuevas todas las cosas”, ¿vamos a despistar (que no perder) la esperanza? Ni por asomo.