May
Las mujeres de Alaejos
3 comentariosParece ser que Quevedo decía: “Calienta más una santa bota de Alaejos que todos los tapices del rey de Francia”. No sé si será verdad, pero lo que sí lo es, es que tiene dos iglesias monumentales, que se ven durante mucho tiempo desde esa carretera que discurre con sus altibajos entre Valladolid a Salamanca. En fin, la cosa es que ayer, haciendo esta ruta, hice un alto para tratar de visitarlas y por suerte, una de ellas estaba abierta. Llegué cinco minutos antes de la misa, así que, como me repatea bastante andar turisteando mientras hay oficios, me quedé a la misa. Más tarde podría seguir admirando esa joya.
No sé cuántas personas seríamos, no más de 40 (probablemente en la misa mayor de hoy habría más, ya que unos cuantos niños hacían la comunión, según anunció el oficiante), de entre los cuales sólo 4 varones, yo incluido: un señor junto a una columna, otro atrás, debajo del coro, un tercero (que creo que también era visitante, ya que al entrar echó un gran vistazo en derredor, abrumado, creo, por la belleza del templo) y servidor. El resto, mujeres, incluidas dos niñas. No sé si esta muestra es representativa, pero no creo errar demasiado si supongo que el porcentaje de mujeres que hacen que la Iglesia siga siendo una realidad viva supera bastante a los varones. No sólo rezan y participan en la liturgia, sino que son catequistas, están en los consejos parroquiales, cantan en los coros y están presentes en absolutamente todo lo que pueden. En buena parte del mundo hoy celebran el día de la madre, que este año coincide con la Ascensión. No saco ninguna conclusión. Sólo pensaba…